Hace días atrás discutimos lo importante que es la repetición para formar un nuevo hábito. Así como las horas de practicar una pirueta facilitan la realización de una, la práctica en una nueva habilidad, como levantarse de la cama a cierta hora de la mañana, hace que sea más fácil hacerlo.
Pero hay otra clave para formar un nuevo hábito, y esta clave es igual de importante, si no más: debemos tener suficientes razones para querer formar el nuevo hábito. ¡Algo o alguien tiene que motivarme, para que me dé ganas de empezar a levantarme en ese momento!
Haga que valga la pena
Charlotte Mason reconoció ese hecho:
«Sembrar un hábito, cosechar un carácter». Pero debemos ir un paso más atrás, debemos sembrar la idea o el concepto que haga que el acto valga la pena «(Vol. 6, p. 102).
Ya ves, las ideas son motivadores poderosos! Cuando la semilla de una idea echa raíces en nuestras mentes o en las mentes de nuestros niños, puede producir una cosecha abundante. Comenzamos a imaginar cómo se vería esa idea en nuestras propias vidas, y sentimos la agitación de las emociones a medida que soñamos con lo que el futuro podría mantener en ese camino.
Leemos un libro o un blog sobre cómo hacer que nuestros hogares reciban toques de belleza y paz. Nuestros corazones se agitan con el deseo de hacerlo así por nosotros mismos, y empezamos a imaginar cómo se vería eso en nuestro entorno. Esos pensamientos se convierten en reflexionar sobre lo que se necesitaría para hacer realidad esa imagen. Y ahora tenemos una motivación profunda para comenzar a hacer cambios y formar uno o dos hábitos nuevos para poder vivir esa manera.
O nuestros hijos leen un cuento bien escrito sobre una mujer que no estaría contenta pero que siguió agarrando más y más hasta que todo desapareció, y reflexionan sobre esa idea la próxima vez que vean un catálogo de juguetes o creen una lista de cumpleaños. Y el hábito de la satisfacción comienza a crecer.
O escuchan un hermoso poema sobre la creación de Dios y el disfrute que uno puede encontrar al aire libre, y comienzan a desear ese disfrute para sí mismos y piensan cómo podrían pasar más tiempo entre la naturaleza al día siguiente y al siguiente. El hábito de la vida al aire libre está echando raíces.
El hecho es que nunca se sabe cuándo añadirá una idea y comenzará a crecer, pero como Charlotte nos recordó, sería una tontería dejarla al azar. “¿Qué siembran los padres? Ideas ”(Vol. 2, p. 29). Como padres, debemos mostrar esas ideas buenas, cariñosas y nobles en el corazón de nuestros hijos regularmente, intencionalmente, para motivarlos hacia buenos hábitos.
Escrito por: Sonya Shafer
Traducido al español por: Nelly Vizcarrondo
Reproducido y Traducido con el permiso de Simply Charlotte Mason.
https://simplycharlottemason.com/
Conversando Contigo Mujer 
1 comentario en “Segundo Paso Para Crear Buenos Hábitos: Motivación”